Prof. Freddys Romero Sierraalta
Miembro del Centro de Historia de Paraguaná
Miembro del Centro de Historia de Paraguaná
Juan
Germán Roscio, prócer de la Independencia de Venezuela, nació en San Francisco
de Tiznados (hoy Estado Guárico), el 27 de Mayo de 1.763, hijo de José
Cristóbal Roscio y Paula María Nieves, mestiza, hija de India. Fue uno de los
grandes dirigentes de la guerra por la independencia americana, donde luchó
como escritor, abogado, periodista e ideólogo del nuevo pensamiento
emancipador.
En la Universidad de Caracas fue insaciable en el estudio, leyó los clásicos
europeos y mucha literatura relacionada con los derechos del hombre y del
ciudadano; asimismo, fue un excelente orador, redactor del Acta de
Independencia del 5 de Julio de 1.811 y muchos documentos de gran importancia.
La actuación pues, de Juan Germán Roscio, fue de una acción patriótica intensa,
donde fue víctima de encarcelamiento y exilio, manteniendo siempre un esfuerzo
permanente en contra de la discriminación racial, como lo demuestran los dos
acontecimientos que se mencionan a continuación:
En 1.774 viajó a Caracas donde obtuvo el título de Doctor en Derecho Canónico y 2 años después el de civil, pero, como era hijo de mestiza hija de India-, el Colegio de Abogados no lo quiso admitir como miembro, alegando que en el expediente de limpieza de sangre no estaba el calificativo de "India" como en otros documentos que se le asignaban a su madre. Esta situación le dio la oportunidad a Roscio de iniciar un juicio que llevó adelante con brillantes alegatos y consiguiente triunfo, que permitió su admisión en el mencionado Colegio de Abogados.
Otro juicio planteado por nuestro prócer fue el de la mestiza Inés María Páez, quien, cansada de vejaciones y discriminaciones en la Venezuela colonial cargada de leyes segregacionistas, con mucho coraje y valentía, se arriesgó a una condena de muerte al arrodillarse en una alfombra de la iglesia en la celebración de una misa, privilegio solo reservado a los mantuanos u oligarquía colonial.
En 1.774 viajó a Caracas donde obtuvo el título de Doctor en Derecho Canónico y 2 años después el de civil, pero, como era hijo de mestiza hija de India-, el Colegio de Abogados no lo quiso admitir como miembro, alegando que en el expediente de limpieza de sangre no estaba el calificativo de "India" como en otros documentos que se le asignaban a su madre. Esta situación le dio la oportunidad a Roscio de iniciar un juicio que llevó adelante con brillantes alegatos y consiguiente triunfo, que permitió su admisión en el mencionado Colegio de Abogados.
Otro juicio planteado por nuestro prócer fue el de la mestiza Inés María Páez, quien, cansada de vejaciones y discriminaciones en la Venezuela colonial cargada de leyes segregacionistas, con mucho coraje y valentía, se arriesgó a una condena de muerte al arrodillarse en una alfombra de la iglesia en la celebración de una misa, privilegio solo reservado a los mantuanos u oligarquía colonial.
Sometida a juicio, es defendida por Juan Germán
Roscio, quien con argumentos magistrales acerca de la igualdad que todos
tenemos ante los ojos de Dios, ganó aquella querella que quedó para la
posteridad histórica como un ejemplo de lucha contra la discriminación racial
en una de las épocas más crueles de la Historia de Venezuela.
Reinaldo Bolívar, en su libro Los olvidados del Bicentenario , recoge una serie
de opiniones de diversos personajes acerca de este ilustre patriota.
Entre
estas considero muy significativa la de Pedro Grases, quien escribe: "A mi
juicio, Juan Germán Roscio es uno de los primeros y preclaros nombres entre los
cuatro o cinco más ilustres en la esforzada empresa de la independencia
hispanoamericana".
A Roscio hay que adjudicarle el debido reconocimiento por
haberse convertido en el campeón de la revolución de las conciencias, en el
profundo examen de la razón y base del poder público.